domingo, 25 de abril de 2010

QUI-TÚ-INFINITU

Me permites ver gran parte de ti mientras reduces el día al rumor de la lluvia. Muy lejos, el Panecillo queda reducido a una ligera distorsión de tierra franca. Yo solo soy presa de un abrupto nostálgico que todo lo deforma…
¡Qué hacer! Pese a la ilusión de estar contigo, mantengo la vista fija donde aparentas estar, perdida entre los coamantes, perdida entre espacios que desvalijan a mi frágil corazón de recuerdos que te acompañaran. Infinitamente, Quito…

No hay comentarios: